Rusia se quedará con parte de Ucrania

Hay sectores que dicen que la guerra declarada por el Presidente Vladimir Putin, de Rusia, a Ucrania, no tiene sentido.

Pues están equivocados. El interés de Rusia es quedarse con parte de Ucrania, especialmente de la zona del Mar Negro, para tener acceso directo a mercados que ahora no lo tiene, por estar bajo el control del país invadido, básicamente para exportar su petróleo y sus alimentos, pero también para contar con uno de los principales aeropuertos ucranianos ubicado en esa región.

Quedando con parte de la zona influida por el Mar Negro, Rusia también tendrá el control militar y disminuirá el acceso de la Organización para el Desarrollo del Atlántico Norte (OTAN), que es adversaria a su régimen, compuesta por los Ejércitos de Estados Unidos y Europa.

Además, Rusia quiere disminuir la incidencia que tiene Ucrania en la producción y comercialización de granos. Rusia y Ucrania son los dos principales países exportadores de granos del mundo.

Son esas las razones que hay que decir que Rusia le ganará la guerra a Ucrania. ¡Y será así, porque el presidente Putin está en la obligación de justificar los miles de millones de dólares que está gastando en esa invasión!

Es ilógico pensar que Rusia esté haciendo esos gastos militares en una invasión un país democrático y luego de terminada la guerra, le diga a su pueblo que perdió el conflicto bélico de una nación decenas de veces más pequeña.

La pérdida de terrenos ucranianos es insalvable. Rusia no podrá restablecer el control de Ucrania a su favor, porque es un pueblo que observa mal al gobierno ruso, por la gran cantidad de muertos y destrucción de propiedades, a causa de las bombas lanzadas por sus aviones o los disparos de tanques. ¡Pero se quedará con la parte planeada!

Esa guerra no sólo está destruyendo la economía de Ucrania, sino también la rusa. Y los problemas rusos serán mayores cuando se sepa las bajas militares sufridas por su Ejército.

La ocupación de parte del territorio de Ucrania, fue planeado hace años por el Presidente ruso, que al mismo tiempo ignoró el poder de resistencia del Ejército ucraniano y su pueblo, por lo que está recibiendo golpes morales por la muerte de varios de sus mejores generales, sin contar otros oficiales o miembros de categorías más bajas de sus Fuerzas Armadas.

El Presidente Putin ya perdió gran parte de su popularidad, porque carga con una economía sumamente debilitada, unida a las bajas militares. Y también perdió su expansión en otras zonas, como es el caso de América Latina, que antes aplaudía su presencia.

¡Es el precio de una guerra inesperada que sorprendió al mundo, cuya mayoría está apoyando a Ucrania!